Después de toda la fiesta nocturna de la universidad, ¿cuál es el problema principal del que se quejan la mayoría de los estudiantes cuando todo ha terminado y se han graduado? La respuesta es la deuda estudiantil. Los niveles de deuda estudiantil continúan aumentando cada año a medida que los bancos y otros prestamistas les otorgan más y más crédito mientras aún están estudiando. Parece que los bancos tienen mucha fe en que los graduados puedan devolver los préstamos, y la mayoría de los graduados lo confirmarían. Lo que está causando estrés a los graduados no es el nivel general de deudas que han acumulado mientras estudiaban, sino el hecho de que tienen que pagar una proporción tan alta de sus nuevos salarios en el servicio de la deuda.

La graduación y el nuevo comienzo de la vida laboral

Se supone que la graduación y el comienzo de su vida laboral son una época de relativa prosperidad y las privaciones y economías de los años de estudiante deberían finalmente terminar. Sin embargo, cada vez más graduados informan que tienen que pagar tanto en reembolsos de préstamos que están tan mal como cuando son estudiantes.

Préstamos patrocinados por el Estado

Por ejemplo, una gran proporción de la deuda estudiantil se compone de préstamos estudiantiles patrocinados por el Estado. Si bien esta parece ser una forma bastante suave de pagar los préstamos estudiantiles, debe recordarse que estas no son las únicas deudas que tienen los estudiantes.

Tarjetas de crédito

Luego están las tarjetas de crédito y las tarjetas de tiendas, que son cada vez más fáciles de conseguir. Agregue a esto los gastos de mudarse de casa cuando se gradúe, comenzar un nuevo trabajo, conseguir un nuevo lugar para vivir, y no es de extrañar que la mayoría de los graduados se sientan tan limitados financieramente como cuando todavía estaban estudiando.

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